volver a página de accesoRamón Gómez de la Serna
página actualizada a  27/12/01
enviar un correo   

Boletín
RAMÓN   diccionario de su vida   bibliografía  estudios  periodismo  noticias  foro  

BoletínRAMÓN nº1 >BoletínRAMÓN nº2  >BoletínRAMÓN nº3

ISSN: 1577-1229

 

BoletínRAMÓN1, otoño 2000

 

Contenido
Presentación
Las obras completas de Ramón en Galaxia Gutenberg-Círculo de Lectores
Ramón Gómez de la Serna en Alicante, por José Ramón Clemente Torregrosa
Ramón Gómez de la Serna, por Danilo Manera, seguido por Greguerías traducidas al italiano
Anticipo: Correspondencia de Ramón con Guillermo de Torre (1916-1963), por Carlos García
Últimos libros aparecidos: 100 Greguerías ilustradas
Han colaborado en este número

 

PRESENTACIÓN
Este boletín es un homenaje, un recuerdo y un intento de acercamiento a Ramón, a su persona y, en la medida en que es más fácil, a su obra.
El pequeño boletín actual no quiere crecer y espera mantenerse así, con sus pocas páginas.
Nace ligado a: www.ramongomezdelaserna.net, sitio dedicado íntegramente a Ramón, en el que se repasa su entorno biográfico y su bibliografía, se da cuenta de las noticias sobre su figura y se lleva actualizada la relación de estudios sobre su vida o su obra.
Además, se puede mantener un intercambio de opiniones ordenado en el foro que acoge.
En este boletín aparecerán las novedades más interesantes en cualquiera de los campos antes citados.
Este boletín se distribuye de forma gratuita a quienes lo soliciten a la dirección indicada al pie de la publicación.

 

LAS OBRAS COMPLETAS DE RAMÓN GÓMEZ DE LA SERNA
Círculo de Lectores y Galaxia Gutenberg publican la Obra Completa de Ramón.
Han aparecido ya los volúmenes I, II, III, IV, V, IX, X, XI, XV y XX. Ioana Zlotescu ha estructurado la obra ramoniana en los llamados ‘espacios literarios’, a saber: "Prometeo", Ramonismo, Novelismo, Retratos y biografías, Teatro, La ciudad y Escritos autobiográficos.
Se proyectan 21 volúmenes, que se organizan con un preámbulo y un prólogo, la propia obra, notas a la edición y fichas bibliográficas.

 

RAMÓN GÓMEZ DE LA SERNA EN ALICANTE
JOSÉ RAMÓN CLEMENTE TORREGROSA
(de mis "notas" ‘El recuerdo y la historia de Alicante’)

RAMÓN vino a Alicante el 4 de Enero de 1933. Creo que es la única vez que lo hizo. Y cuando esto sucedió, fui, con otros, en cierta manera, su "empresario".

En aquellos años estudiaba yo en Madrid y asistí a una de sus "charlas de la maleta" en lo que hoy es el Teatro María Guerrero. El acto estaba organizado por la Federación Universitaria de Estudiantes (F.U.E.) de la Capital. RAMÓN se presentaba en el escenario provisto de una maleta, de la que iba extrayendo los objetos más diversos, en su mayoría viejas y ridículas estatuillas de yeso, o barro cocido, o absurdos cachivaches, a los que "ejecutaba" con un martillazo, reduciéndolos a escombros, una vez que las sentenciaba, dialécticamente, por su estructura o significado. "Los hogares, la vida, la convivencia –decía- estaban embrutecidos con aquellas aberraciones seudoartísticas". De cuando en cuando lanzaba al público, como aleluyas, "greguerías" autógrafas, en papeles satinados, amarillos, escritas con tinta roja. Aquel día, habló de su gran descubrimiento: Un aparato, parecido a un gran fonendoscopio médico que, aplicado a las páginas de un libro, nos decía si debíamos , o no, leerlo, con lo que se evitaban pérdidas de tiempo y de materia gris. Otras muchas más cosas líricas, dichos y refranes, como una gran e ingeniosa greguería, completaban el acto.


Pensé, entonces, que sería interesante conseguir que RAMÓN viniera a nuestra Ciudad y pronunciara aquí, una de estas charlas. Con la osadía propia de la juventud, cuando llegué a Alicante en las vacaciones de Navidad del año 1932, puse manos a la obra.

Recuerdo que hablé con Alvaro Botella, Director del periódico "El Luchador". Y en el Ateneo con algunos amigos –Gastón Castelló, Rafael Rodríguez Albert, Carlos Carbonell, José Juan Pérez, Antonio Blanca, etc.- 
A todos les parecía magnífica la idea y, todos, la patrocinaban, oralmente, con entusiasmo. Pero la cosa no pasaba de ahí.

Acudí a la Federación Universitaria de estudiantes de Alicante, cuyo Presidente era José Chápuli Ruzafa y tuve la suerte de que, para aquellos días de Diciembre, exactamente para el 29, tenía anunciada su venida "La Barraca", con García Lorca, Ugarte, y todos sus componentes que iban a actuar unos días en el Teatro Principal.

Encontré en Chápuli, al que igual que a los demás, le entusiasmó mi iniciativa, un magnífico colaborador. Y pensamos que si hacíamos coincidir la actuación de RAMÓN en Alicante, por las fechas en que "La Barraca" iba a actuar, ello podría ayudarnos a la financiación, puesto que dispondríamos de entradas para el Principal, gratuitas, para "La Barraca" y la FUE de Alicante , podría asi "colocar" las de pago para RAMÓN. Es decir, que los estudiantes alicantinos organizarían dos actos por el "precio de uno". Al recapitular hoy sobre tan inocente "fraude", tengo que decir que su motivación fundamental era el verdadero temor que teníamos de que nadie iba a asistir a la conferencia de RAMÓN, que, sondeos previos, nos daban como desconocido en la actividad de conferenciante.

Alvaro Botella se ofreció acompañarnos a ver a Félix Lorenzo, el ilustre periodista de "El Sol", que firmaba sus crónicas con el seudónimo de "Heliófilo" y que, a la sazón, invernaba en el Hotel Palace... Félix Lorenzo era buen amigo de RAMÓN, y, encantado, nos aseguró que iba a escibirle solicitándole sus "condiciones económicas", terrible caballo de batalla, porque nuestros entusiasmos y "trucos" terminaban en la primera peseta que hubiera que desembolsar.

Efectivamente. Días después, no muchos, nos llamó "Heliófilo" para leernos a Chápuli y a mí, la carta que acababa de recibir de RAMÓN. En ella se mostraba complacido de la invitación, se alegraba de que fuéramos "gente joven" sus "promotores" y anunciaba que podría venir para los primeros días del año 1933, solicitando por su intervención ¡seiscientas pesetas!, siendo de su cuenta gastos de viajes, hotel y comidas, y de la nuestra todo lo demás, remarcando: "... y una mesa y una botella de agua mineral sin gas".
He aquí cómo nuestra tesonería juvenil, hacía realidad el propósito. Y todo ello, de momento, sin una peseta y sin la más mínima perspectiva de ayuda económica.

Recuerdo que se me asignó la difícil papeleta de entrevistarme con don Luis Altolaguirre, empresario del Teatro Principal, y que fue amigo de mi padre. La entrevista que con él mantuve, fue correcta e incluso cariñosa por parte de Altolaguirre quien, después de conocer nuestros propósitos me dijo con tintes sombríos "si sabíamos dónde nos íbamos a meter" y que "a estos actos no vienen ni las ratas". Acabando por facilitarnos el Teatro Principal para el 4 de Enero de 1933, fecha en que estaba libre y que, esto lo supimos después, por la tarde era día de poca asistencia ya que los Reyes Magos estaban a punto de bajar por la Montañeta.

Aunque es muy difícil tener plena seguridad de datos y números, dado el tiempo transcurrido, creo que el alquiler del Teatro, con personal de tramoyistas, taquilleros y acomodadores, taquillaje, etc..., suponía unas dos mil pesetas, que el precio de las butacas lo fijamos, después de una amplia discusión, y con la camisa sin llegarnos al ombligo, en 3 o 5 pesetas, con ello, mal contado y a local lleno cubríamos a duras penas el presupuesto.

Hablamos con Gastón Castelló para que decorase el escenario. Y con Gonzalo Soriano, que entonces empezaba a demostrar el gran pianista que luego fue, para que interviniera en la primera parte del acto.
Un telegrama de "Heliófilo" a RAMÓN concretaba el día y la hora dichos. Y la lacónica respuesta: "Estaré Alicante tres Enero. No olviden agua Solares. RAMÓN", dio luz verde a que el grupo de amigos, estudiantes y ateneístas nos dedicásemos a "colocar" entradas visitando comercios, centros, etc..., con las dificultades propias y numerosas puertas en las narices.

RAMÓN, como el "estudio de mercado" nos había indicado, no era, desgraciadamente, muy conocido en algunos medios sociales de la Ciudad. Por otro lado nuestra juventud e inexperiencia era una traba para lo que hoy se llama la "comunicación". Y el móvil simplemente cultural del acto, tampoco era decisorio para llenar el teatro. Gracias a las entradas gratuitas de "La Barraca" que hacía "duplicar" el interés a los tibios, por un solo precio, pudimos a trancas y barrancas, ir vendiendo las localidades. Casi todas. Nuestro interés era enorme. No podíamos dejar para última hora un hipotético flujo de público a la taquilla.

Mientras tanto Gastón Castelló empezó a trabajar en los decorados: Un arpa blanca sobre un fondo azul para el concierto de Gonzalo Soriano. Y un gran resumen, plásticamente gastoniano, de las más conocidas "greguerías", el de RAMÓN, en el que se traducían a imágenes los escuetos y punzantes pensamientos ramonianos.

Para no cansaros más os diré que la recaudación conseguida no cubría la totalidad de los gastos. Palcos, donativos y alguna rebaja de Altolaguirre permitió que los empresarios improvisados salváramos nuestra responsabilidad crematística y que respiráramos tranquilos, dedicándonos a esperar la llegada de RAMÓN.

Creo que llegó el propio día 4 de Enero de 1933, por la mañana. Es posible que fuera el día anterior. Fuimos a la Estación de M.Z.A. (hoy RENFE) a recibirle Rodríguez Albert, Chápuli, Soriano y yo. No se si nos acompañaba alguien más. Sí es así que perdone mi olvido.

RAMÓN venía acompañado de Luisa Sofovich a la que nos presentó como ilustre escultora argentina. Luego fue su esposa.

Recuerdo que RAMÓN se alegró ostensiblemente, y así lo dijo, que la gente joven se acordara de él y le apoyara. Se alojaron en el hoy desaparecido Hotel Samper, en la Explanada, donde hoy está el Carlton.
Pidió que le acompañáramos para conocer Alicante. Nos habló repetidamente de Pombo y al enterarse que alguno de nosotros estudiaba en Madrid, insistió en que no dejáramos de ir por la tertulia cuando nos incorporáramos a la universidad. "Se necesita que la gente joven herede la sagrada cripta de Pombo" dijo.

Fuimos A Elche, en tren, Luisa Sofovich, Rafael Rodríguez Albert y yo. Aún conservo el testimonio fotográfico de aquella excursión. Al ver la famosa palmera del cura dijo: "Más que del cura debería decirse de Buda por sus múltiples brazos".


de izquierda a derecha: Clemente, Rodríguez Albert, Luisa Sofovich y Ramón.

El acto se celebró en la hora y día fijado. El éxito fue enorme. Cuando RAMÓN, desde su maleta, lanzó al público sus greguerías autógrafas, yo, que me había reservado una butaca en las primeras filas, cogí al aire una, que he conservado entre mis "tesoros" sentimentales, hasta que los avatares de la guerra civil la hicieron desaparecer. Decía: "Las cintas de las gorras de los marineros van diciendo adiós a todos los mares".

El Luchador del día 5 de Enero de 1933 publicó esta reseña:
"RAMÓN Gómez de la Serna en la escena. Con su maleta preñada de muchos cachivache. Esos cachivaches sobre las tablas, son greguerías personificadas –una greguería más- que el ilustre humorista ha creado. Las ideas tamizadas por el estilo punzante de Ramón Gómez de la Serna tienen un sabor agrio que alienta el ánimo como la sidra agridulce, que cosquillea en las narices, templa los nervios, y, a veces, afloja los músculos. De todas maneras el escritor ha sabido anoche cautivar al público durante dos horas con su fino ingenio. Grandes aciertos parciales en su charla de la maleta como aquel del llamador, como en algunas de sus greguerías, como su final, parodiando, con certeros latigazos, a los oradores.
GÓMEZ DE LA SERNA es un formidable crítico que ahonda en sus juicios flageladores, todo aspecto de la vida. Desde la prensa, con sus greguerías escritas, y ahora con sus "greguerías actores", consigue un resultado de arte, de orientaciones muy personales, que afirma más su fisonomía destacada en el arte español.
Fue muy aplaudido y algunas frases, algunas greguerías materializadas, recibidas con ovaciones".

También el día 2 de Enero de 1933 el mismo periódico anunciaba el acto con esta croniquilla:
"El 4 oiremos en el Principal al genial GÓMEZ DE LA SERNA, en una de sus magníficas intervenciones, en la función que se organiza por los estudiantes, con el Ateneo. Gonzalo SORIANO, nuestro gran pianista dará un exquisito concierto, dando ambos aspectos un carácter eminentemente artístico al acto".
Antes de iniciarse éste, asistimos divertidos y asombrados, al solemne momento en el que RAMÓN fue llenando su maleta de los cachivaches, de las greguerías, de los objetos diversos y multicolores. Y también, recuerdo, tuvimos que colocar sobre la mesa, junto a la maleta, en el escenario, el vaso, y la "botella de agua mineral sin gas".

RAMÓN se quedó algún día más en Alicante, en compañía de Luisa Sofovich. Le agasajó el Ateneo. Visitó el Ayuntamiento, Santa María, el puerto, la playa, la Explanada, etc...

Pero permitidme que cuente, para terminar, lo que podríamos calificar como continuidad de aquella amistad de RAMÓN, tan sinceramente ofrecida a los jóvenes alicantinos, así como una anécdota desconocida que con él vivimos:

Días después del acto del Principal, se acababan nuestras vacaciones estudiantiles, Teníamos que regresar a Madrid. Y lo hicimos, con RAMÓN y Luisa Sofovich, Gonzalo Soriano y yo. En un vagón de tercera, Alicante-Madrid, que tenía el precio de 25 o 40 pesetas. Un tren fragoroso, lento, con abundante carbonilla, que penetraba no se sabía por dónde, y que siempre se depositaba en los lagrimales de los viajeros.
Durante el viaje, efectuado de noche, sucedió algo realmente gracioso e imprevisto que dio pie a largas ocurrencia ramonianas. Mediado el camino llegó al departamento que ocupábamos los cuatro, un Policía, de la "secreta", que nos solicitó la documentación. Era, entonces la "cédula", ligero papelillo intranscendente y nada identificatorio, el único documento de tal carácter que poseíamos los españoles. Todos los exhibimos. Excepto Luisa Sofovich, que al ser de nacionalidad argentina, mostró su pasaporte. El policía, de menguada estatura, observó detenidamente el documento y, luego, respetuosamente lo devolvió preguntando a la interesada:

- ¿Es Vd. Piloto de aviación?

El asombro de Luisa Sofovich no es para descrito. Y el propio RAMÓN con la voz tonante de sus grandes momentos, pidió a Luisa que explicara "sin reparos ni circunloquios" su doble personalidad, ya que, dijo: "desconozco esa segunda profesión". Todo quedó aclarado cuando, a la vista del pasaporte, comprobamos que en él aparecía escrito, con caracteres destacados de una imprentilla la palabra "PILOTTO", con dos "tes", que en realidad no correspondía a la profesión de Luisa, sino al apellido del funcionario argentino, que, de alguna manera intervenía en la autorización del documento en cuestión.

Se le aclaró, entre sonrisas, al policía su "lapsus". Y durante horas RAMÓN estuvo "jugando" humorísticamente con el incidente.

Ya en Madrid, RAMÓN insistió en nuestra visita a Pombo. Y Gonzalo Soriano y yo fuimos varios sábados a la "sagrada cripta", en la que el escritor se reunía con sus amigos ante el cuadro de Solana, que le servía de fondo. Nos presentó a todos como "empresarios suyos", como artistas, especialmente a Soriano.
Con RAMÓN y sus amigos dimos varias noches las rituales vueltas a la Puerta del Sol, antes de retirarnos a dormir. Nos invitó para que visitáramos su torreón en la Calle de Velázquez, y así lo hicimos. El farol, la mujer maniquí, el panecillo con cuerda, las bolas de cristal, el álbum del circo, de Picasso, quedaron grabados en nuestro recuerdo.

Pero la verdad, sin desfiguraciones, es que tanto Soriano, como Chápuli y yo, y como tantos como nosotros, éramos demasiado jóvenes, y nos sentíamos abrumados ante aquellos amigos de RAMÓN, literatos, pintores, poetas. Para nosotros, provincianos estudiantes en Madrid, aquella vida literaria, divertida y algo bohemia, estaba muy lejos de nuestro ambiente, de nuestros estudios, de nuestros condicionamientos familiares. Y ahora, al recordar al RAMÓN que conocimos en Alicante y luego en Madrid, comprendemos, con desesperanza, que sólo queda la anécdota, lo tangencial, la superficie de algo que pudo haber sido fuente de algo más consistente.

Yo sigo viendo a RAMÓN, como una sombra. De poca estatura, algo "rechoncho", con su pipa en la boca y sus brazos, siempre, algo separados del cuerpo, con su voz recia y tajante, en la Explanada, "improvisando" ante las palmeras:

"Gran escoba invertida para barrer los malos pensamientos en el aire, antes de que caigan al suelo". "Castillo de fuegos artificiales congelados". "Bomba inofensiva de palmas".
Junto a esa sombra de RAMÓN, en Alicante, están, también, las sombras juveniles de todos los que, con él, convivimos aquellos días.

Yo sigo viendo a RAMÓN, en Pombo, aquella noche en la que "desafió" a sus contertulios a que "improvisaran" una "greguería". Aún veo su amable sonrisa cuando leyó la mía: "El pijama es el disfraz que nos ponemos para desempeñar la comedia de los sueños".

Soñar no cuesta nada. Soñemos que los jóvenes alicantinos, y entre ellos yo, como uno más, dejamos que se cerrara la puerta de su amistad, que, tan sinceramente, nos ofreció.

(publicado en el nº31 de la Revista del Instituto de Estudios Alicantinos, hoy Instituto Gil-Albert)


RAMÓN GÓMEZ DE LA SERNA
DANILO MANERA

Ramón Gómez de la Serna (nato a Madrid nel 1888 e morto in autoesilio a Buenos Aires nel 1963) fu in Spagna il santone e la grancassa di tutte le avanguardie del primo novecento, che sperimentò, manipolò e diffuse con la sua irrefrenabile vitalità, una grafomania che gli permetteva di firmare svariati titoli l’anno e un geniaccio tra lo scanzonato e il futurista che gli fece pronunciare conferenze in groppa all'elefante di un circo, arrampicato su un lampione o legato a un tavolo. Frequentatore di burle e novità, tra il frivolo e il pensoso, fu un eroe dell’epoca di Picasso, Charlot, Apollinaire, Buñuel, Dalì, Macedonio Fernández, Larbaud, de Falla, Cami, Gris, e di molti burrascoso amico. Popolarissimo negli anni ‘20 e ‘30, si sta riscoprendo in Spagna e fuori. Octavio Paz l’ha definito "immenso come Lope de Vega, e come lui popolare, prodigioso, inesauribile".

L’invenzione che rese "Ramón" universalmente noto, lo accompagnò per tutta la vita e ancora oggi viene associata immediatamente al suo nome è la greguería. Il termine sta per "schiamazzo", "urlio", "trambusto" o simili, ma ormai viene inteso, anche dai dizionari, a designare appunto il genere da lui creato. Si tratta di compresse d’irriverente umorismo e associazioni eccentriche che costituiscono anche un lavorio sull'immagine poetica destinato a lasciare un segno nei poeti della "generazione del ‘27", come riconoscono Luis Cernuda e Pedro Salinas.

Le greguerías sono inciampi del linguaggio, fiori inusitati del quotidiano che sbocciano in mezzo all’incredulità, frantumi lasciati da uno sguardo divertito e demolitore, ghiribizzi poetici, minuscoli ma vertiginosi paradossi che esaltano l'imperfezione, l’accumulo caotico, l’intermittenza. Sono stati indicati vari possibili antecedenti (dal wit barocco alla casida araboandalusa all'haikai giapponese, eccetera), ma esse furono più che altro il frutto dello sfrontato estro modernista, tra kitsch e dada, unito al peculiare gusto dell’autore per il bric-à-brac, che gli scodellava il mondo come uno sterminato, visionario mercatino delle pulci, non di rado tendente più all’obitorio che al luna park.

Ho curato due raccolte in italiano di queste battute di aforistica leggera dettate in alfabeto Morse, entrambe per la Biblioteca del Vascello, editrice romana coraggiosa e sfortunata i cui volumi si trovano ormai solo più per caso. Qui ne offro una carrellata da centellinare, con l’augurio che il lettore si ritrovi poi a inventarsene di sue, conquistato dal fascino senza pretese di questo festoso brusio di nuove congetture su quanto ci circonda.

 

GREGUERÍAS
traducidas por DANILO MANERA

Se uno conosce troppo se stesso, smette di salutarsi.

L’amore nasce dal desiderio improvviso di rendere eterno il passeggero.

I cani ci mostrano la lingua come se ci avessero presi per il dottore.

Il lettore - come la donna - ama di più chi più l’ha ingannata.

Affacciandoci al fondo del pozzo ci facciamo un ritratto da naufraghi.

Il sogno è un deposito d’oggetti smarriti.

I laghi sono le pozzanghere rimaste dopo il Diluvio.

Ci sono cieli sporchi in cui sembra siano stati sciacquati i pennelli di tutti gli acquarellisti del mondo.

La polvere è piena di vecchi e dimenticati sternuti.

La vestaglia da bagno rende frati le donne, ma depongono subito l’abito.

Chi gioca a dadi sembra che getti in aria le ossa in sovrappiù.

La matita scrive ombre di parole.

Nulla torna, ma tutto si somiglia.

Quando la donna chiede macedonia per due, perfeziona il peccato originale.

Ci sono certe pastiglie di farmacia che ci curano, se non altro, dalla tristezza di aver perso tanti bottoni della biancheria intima.

La bandiera sale su per l’asta come se fosse l’acrobata più agile del mondo.

I fiori muoiono in odore di santità.

Il grillo misura le pulsazioni della notte.

Sui fili del telegrafo rimangono, quando piove, delle lacrime che rendono tristi i telegrammi.

La malinconia dei fiumi d'America è che sono così grandi che non possono avere ponti.

Le farfalle le fanno gli angeli nelle ore d’ufficio.

 

ANTICIPO:CORRESPONDENCIA DE RAMÓN CON GUILLERMO DE TORRE, (1916-1963)
CARLOS GARCÍA, Hamburgo

La relación entre Ramón y Guillermo de Torre y Ballesteros (1900-1971) comenzó en 1916, cuando Cansinos insinuó a éste que aquél podría ser el maestro idóneo que estaba buscando. Ambos jefes de tertulia han relatado, no sin malicia, la historia de su conocimiento con el precoz "Guillermito", como se llamaría por años al ambicioso y ágil Torre en los corrillos literarios. (Cansinos lo hizo en su Novela de un literato; Ramón en Pombo.)

La carta reproducida a continuación es la número 5 de una serie que contiene aproximadamente un centenar, cuya edición anotada daré próximamente a luz. La primera misiva conservada es de 1916, la última de 1963, año del deceso de Ramón.

Se trata de una carta de Ramón a Torre, remitida desde Madrid, sin fecha (la dato 11-XI-20), conformada por 2 páginas manuscritas (el original se conserva en la Biblioteca Nacional, Madrid, bajo la signatura Ms. 22824/15, 5).

El estilo, entreverado, nos muestra a un Ramón que escribía como atosigado por sus propias ideas, arrastrado por el lenguaje. Hay allí algunos ripios estilísticos y una gramática poco ortodoxa, pero se advierte su pasión por lo literario y lo nuevo.

[Madrid, 11-XII-20]

Querido Guillermo:

Pronto me ocuparé de Vd., no sea Vd. impaciente (1). Irá Vd. en su sitio y pondré todo el cariño que pueda en la crítica aunque también toda mi sinceridad.(2)

No sea Vd. demasiado niño ya. Eso le perjudicaría. Lo de Canedo no está mal. Para muchas juventudes sería envidiable ese largo suelto diga en él lo que diga Canedo (3). No apure Vd. las cosas hasta que sean verdadero odio y desprecie el que pueda sentir. Está Vd. demasiado excesivo con un personalismo que puede llegar a ser inaguantable \2\ en el gesto aunque no [dos palabras ilegibles] con lo que escribe que de sus cosas que les han parecido a los demás arbitrarias ha habido muchas, y sin embargo no se han encarnizado con su importador – cosa que podría pasar ahora.

Encuéntrese. Busque en su imaginación verdadera imaginación. No supedite a una constante cita de nombres en un orden que Vd. como un Dios crea en fantasía y ese espíritu que hay en Vd.

Sálvese en ese mismo camino (Vea que subrayo lo del mismo camino y por lo tanto no puede Vd. decir que no le comprendo. Yo en el libro mucho intenté absolutamente lo mismo, pero avanzando por meses aquello solo duró seis meses en mí.

Le abraza RAMÓN

La dura, pero comprensiva y solidaria crítica de Ramón (4), junto a la de otros autores mayores, de la talla de Alfonso Reyes y José Ortega y Gasset, haría sentar cabeza al joven Torre. Una de las consecuencias sería su abandono de la poesía, y una actitud más positiva y mesurada en sus trabajos críticos.

La amistad entre ambos grafómanos continuaría hasta la muerte del mayor. Sufrió, sin embargo, algunos altibajos, y hasta una larga interrupción, motivada por cuestiones políticas, ya que Torre era republicano, y Ramón cometió la imprudencia de hacer en Buenos Aires algunos comentarios favorables a Franco. Tras la contienda, a partir de octubre de 1939, Torre depuso su silencio, y continuó promoviendo la publicación de trabajos de Ramón en Argentina, como lo había hecho antes.

El epistolario en vías de publicación arrojará intensa luz sobre la época de las vanguardias históricas, al tiempo que servirá para iluminar algunos entretelones del campo intelectual y editorial a ambos lados del Atlántico.

Notas:

(1) 
Torre, en su afán de figurar, debe haber inquirido a Ramón por el retrato suyo que éste le anunciara en una carta previa, sin fecha, pero del 29-VII-20.
 
(2)
 Ramón publicará un retrato de Torre en La Sagrada Cripta de Pombo (1924).

(3)
Enrique Díez-Canedo había publicado poco antes, en España 292 (Madrid, 4-XII-20, 11), un duro comentario sobre "Vertical. Manifiesto Ultraísta" de Torre, aparecido como separata de Grecia 50, 1-XI-20 (último número de la revista). Días después, Canedo volvería a cri­ticar de pasada a Torre, en su reseña de Reflector (un número, fechado en diciembre de 1920; apareció hacia el 4 del mes), pu­blicada en España 294 (18-XII-20, 11). Torre se enfadó por la primera crítica, y buscó aliados en el ámbito publicístico, a la par que componía un furioso texto de respuesta. Tal se desprende, por ejemplo, de su correspondencia paralela con Alfonso Reyes (cuya edición, a mi cargo, es inminente en México). También Reyes disuadió a Torre, con elegante y sabia retórica, de proseguir su polémica con Canedo.
(4)
Ya ejercitada en cartas previas, como en una sin fecha, que dato el 29-VII-20 (BNM, Ms. 22824/15, 3): "Busque Vd. en la naturaleza un secretillo y dénosle. Hasta que no consiga por fin esto no ha­brá dejado de engañarnos y de engañarse. / ¿Quiere Vd. ser via­ble o morir en un frasco de alcohol? Pues bus­que Vd. algo que sino sus canas van a ser de este otoño y eso se ría bochornoso. Todo lo que no sea la densa originalidad enjundiosa de siempre será cosa vieja este otoño, no le quepa duda." 

 

ÚLTIMOS LIBROS APARECIDOS
Quizá uno de los últimos libros dedicados a Ramón, publicados en España sea el de una nueva editorial, la valenciana Media Vaca. Se trata de: 100 Greguerías ilustradas, con ilustraciones de César Fernández Arias, editorial Media Vaca, Valencia 1999.


portada del libro

El libro se completa con un retrato de los autores, escrito por Juan Manuel Bonet:
’Gracias le sean dadas a Vicente Ferrer, por haber propiciado este iluminador encuentro, este diálogo fructífero entre César Fernández Arias y Ramón Gómez de la Serna, diálogo greguerístico que empieza desde la cubierta misma: un retrato precioso, rutilante, en rojo, amarillo y negro, del mascarón de proa de todas nuestras vanguardias, retrato al que siguen unas guardas superpobladas y asimismo formidables. Este libro estoy seguro que ocupará un lugar de honor tanto en la biblioteca de los niños vanguardistas como en la de los ramonianos’.

Al comienzo del libro nos aparecen estas palabras de Ramón:
"(...) Nunca sabré qué cosa es greguería, cuántas quedan posibles, dónde se encuentran las buenas.
Para crear greguerías hay que ordeñarse los pelos uno a uno."


La dirección de la editorial es c/Salamanca 43, 46005 Valencia.

 

HAN COLABORADO

Jose Ramón Clemente Torregrosa
(Alicante 1912), es abogado, escritor y cineasta aficionado. Conoció a Ramón durante la República y tuvo la oportunidad de volver a verle en su fugaz visita a España en 1949. Miembro de La Barraca, participó activamente en la vida cultural de su ciudad natal, donde fue, antes de la guerra, secretario del Ateneo. En la cárcel compartió celda con Miguel Hernández. Enorme aficionado al cine, ha recibido numerosos premios, todos ellos por sus cortometrajes, realizados dentro de la más estricta disciplina aficionada.

Danilo Manera
es escritor, crítico y profesor en el Dipartimento di Scienze del Linguaggio e Letterature Straniere Comparate, Sezione di Iberistica de la Facoltà di Lettere e Filosofia, en la Università di Milano.En la dirección www.iclab.it/html/manera, mantiene publicados diversos estudios sobre literatura europea, hispanoamericana y española.

Carlos García es escritor e investigador de las vanguardias americanas y españolas de principios de siglo. Gran conocedor de Borges, ha publicado diversos libros sobre su obra poética y su correspondencia. Ha publicado asimismo diversos estudios en revistas, y prepara las ediciones comentadas de los siguientes epistolarios:
- Guillermo de Torre / Rafael Cansinos Assens (anunciado en la páginas del Archivo Cansinos).
- Guillermo de Torre / Alfonso Reyes (próximo a salir en México).
- Guillermo de Torre / Ramón.

 

     volver a cabecera